Hacer una receta con bayas de sauco era algo que tenía pendiente desde hace muchos años. Ha sido una alegría en medio de este tiempo de cuarentenas encontrar cerca de casa más de un árbol cargado de sus diminutos frutos.
Los saucos crecen todos de formas tan diversas. Algunos tuercen sus troncos de tal manera que sus flores y frutos cuelgan al alcance de nuestras manos. La mayoría de estas bayas las tomé de un sauco bajito. Al meterme bajo sus ramas pude ver los racimos pesados colgando entre las hojas. Si me hubiese quedado viéndolo de lejos, guardando la distancia, su presencia y generosidad habrían pasado desapercibidas para mi.
Estos últimos días su sabor me ha acompañado gracias a un concentrado cuya receta es muy sencilla. Sirve de base para aderezar ensaladas o saborizar bebidas frías o calientes, entre otros usos. Al principio pensé que había puesto mucha agua, pero por el fuerte sabor del fruto, las cantidades fueron justas.
Ingredientes: 250gr de bayas de sauco. 250ml de agua. 25gr de panela molida orgánica. Jugo de uno o dos limones pequeños. Yo utilicé limón de castilla. Una variedad pequeña, nativa y que aún tiene semillas. Dos varitas de canela (opcional)
¿Cómo prepararlo? Retira las bayas de sauco de sus ramas y lávalas. Pon en una olla todos los ingredientes y calienta a fuego lento por 30 minutos. Cuando empiece a hervir, mezcla constantemente con una cuchara de palo. Finalizada la media hora, filtra y deja enfriar.
Puedes guardarlo en un frasco o botella de vidrio y conservarlo refrigerado. ¿Por cuánto tiempo? Lo he utilizado durante los últimos 7 días en preparaciones diferentes. Hoy al hacer un aderezo sentí que su sabor había cambiado un poco por la presencia del limón. Sigue estando delicioso, sin embargo, no recomendaría guardarlo por más de dos semana. Este concentrado de sauco es una muy buena opción para reemplazar el vinagre balsámico industrial.
Aderezo de sauco para ensaladas, ingredientes: 15ml de concentrado de sauco. 10ml de aceite de oliva. Sal y pimienta. Preparación: mezcla bien todos los ingredientes y adereza tu ensalada. ¡Voilà!
Saborizante de bebidas: Lo agrego a un vaso de agua fría, caliente o con gas. ¿Cantidad? A tu gusto.
Puedes hacer un concentrado aún más fuerte, disminuyendo la cantidad de agua, y probarlo como aderezo para helados o postres. Seguramente ira bien con un martini o sobre tus pancakes al desayuno.
Experimento, imágenes y texto por Crista.
